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Tras acudir a la cárcel de Barbadillo, Keiko le respondió a la prensa que "él [Alberto Fujimori] se queda en el Perú y vamos a pasar todos los exámenes acá con los médicos peruanos". "Como los tiempos para su libertad todavía no los sabemos por completo decidí traerle su ropa, sus alimentos y sus medicamentos pensando en que [su liberación] probablemente sea hoy, o el lunes o el martes", agregó.

La excandidata a la presidencia señaló su preocupación por el estado de salud de su padre. Además, ante la decisión del Gobierno peruano, destacó que "no es momento de ahondar en las diferencias y en la crisis política".

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha mostrado su "preocupación" ante la decisión del Tribunal Constitucional, pues considera que "afecta el derecho a la justicia de las víctimas". "Los crímenes de lesa humanidad se convierten en una preocupación de la comunidad internacional, constituyendo una gravísima ofensa a la dignidad humana y una negación flagrante de los principios fundamentales consagrados en la Convención Americana sobre Derechos Humanos, por lo que no deben quedar impunes", declararon en sus redes sociales.

Por su parte, el ex ministro de Defensa de Perú, Juan Carrasco Millones, confirmó el jueves 17 de marzo que el Gobierno peruano acudirá ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos para revertir el fallo del Tribunal Constitucional.

Foto: Twitter Keiko Fujimori