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Gendarmería realizó un allanamiento masivo en 31 recintos penales chilenos, en lo que constituye el quinto operativo de este tipo en lo que va de año.

El registro a dependencias de la población penal permitió incautar 806 armas blancas, 376 teléfonos celulares, 121 litros de licor artesanal y un kilo 792 gramos de sustancias ilícitas.

En total, 7.844 internos estuvieron sujetos a revisión por parte de 1.766 funcionarios y funcionarias, informó la institución.

Asimismo, producto del decomiso, 13 internos fueron denunciados al Ministerio Público por el porte de teléfonos celulares, según establece la reciente ley que sanciona esta conducta y que fue aprobada en agosto pasado.

“Estos procedimientos son parte de la política penitenciaria que hemos elaborado desde el gobierno junto con Gendarmería para mantener establecimientos penitenciarios seguros y que estén bajo control total del Estado”, dijo el ministro de Justicia y Derechos Humanos (s) Jaime Gajardo.

Por su parte el director nacional de Gendarmería, Sebastián Urra, destacó la efectividad de estos allanamientos que “se realizan resguardando la seguridad de nuestros funcionarios y funcionarias, de los equipos que ejecutan el procedimiento y de las personas privadas de libertad”.

“Con este tipo de operativos, aseguramos el control total de los establecimientos penitenciarios y entregamos seguridad a la ciudadanía”, agregó.

Desde junio de 2022, fecha en que debutaron, se han realizado 33 allanamientos de este tipo, permitiendo incautar 23.200 armas blancas, 10.752 teléfonos celulares, 6.394 litros de licor artesanal y casi 48 kilos de droga.