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El Partido Republicano anunció este martes que se baja de la mesa técnica que discute la reforma previsional, sumándose a Unión Demócrata Independiente (UDI), al considerar que el Gobierno "no quiere acuerdos". 

Hay que recordar que la UDI decidió renunciar a la mesa debido a que piden la salida del ministro de Desarrollo Social y Familia, Giorgio Jackson, tras el robo de 23 computadores y una caja fuerte.

En el caso de los republicanos, el diputado del conglomerado, Juan Irarrázaval, señaló que "el Gobierno no quiere acuerdos (…) y solo trata de imponer sus ideas a la fuerza. Más que una mesa de diálogo parece la comparecencia a un estrado en donde citan a las fuerzas políticas para decir que hubo diálogo, ponen play a su cantinela y no dan pie para conversar".

El parlamentario agregó que "es lo mismo que pasó en la Convención o con la reforma tributaria: no les interesa dialogar para llegar a puntos comunes. Son indolentes, cada día nos convencemos más que solo les interesa mantener el drama de las pensiones, mantener el clientelismo y los bonos, y lucrar políticamente con ello".

En tanto, el diputado y representante del Partido Republicano en la Comisión de Trabajo, Benjamín Moreno, aclaró que aunque no asistirán a las reuniones, "vamos a mantener a nuestros técnicos al interior para saber bien lo que plantean y de primera fuente".

Agregó que "esta es una reforma necesaria, pero que hay que discutirla en términos técnicos y profundos".

En tanto, este lunes la ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, criticó la postura de la UDI de condicionar los diálogos con el Gobierno para reformas al señalar a Radio Cooperativa que "tener secuestrados a los pensionados es perder totalmente el sentido de responsabilidad".