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Según el contenido de las carpetas investigativas del Ministerio Público, y lo consignado por El Mercurio, diferentes compañeros de trabajo del periodista, testigos y carabineros entregaron su versión en el caso, que tiene cuatro personas formalizadas.

En sus declaraciones, Simón Boric relató que se encontraba cerca de la Casa Central de la Casa de Bello -donde trabaja como jefe de prensa- cuando vio a encapuchados intentando abrir un local de comida rápida.

Al ver esta situación, el periodista indicó que “me acerqué a estos sujetos y los encaré, les dije que su actitud no aportaba en absolutamente nada, ya que estaban atacando a gente trabajadora (...) ante lo cual dos sujetos que se encontraban saqueando el local comercial, se me acercaron y me dijeron 'qué te metí, conch...'".

La situación fue escalando hasta que uno de ellos "me agredió con un palo en mi cabeza y el otro me golpeó con un puñetazo; sin embargo, un señor me tomó del brazo y (...) me intento defender". Más tarde, Boric continúa el relato, "se me acercó una mujer y me escupió en la cara, (...) se me fueron acercando más personas, las que comenzaron a agredirme con patadas y combos".

En el momento en que comenzó a ser agredido, Simón Boric trató de defenderse. "Alcancé a golpear a un sujeto, estaba muy cerca de mí, recuerdo que tenía una bolsa con la que me golpeaba, (….) sólo intenté defenderme y escapar rápidamente del lugar, pero no pude hacer mucho, ya que la turba de personas no me permitía avanzar".

El hermano del presidente continuó su relato, destacando el terror ante la situación vivida.  "Estas personas me gritaban groserías, tales como: 'cuico cul... te vamos a sacar la chu...', 'péguenle más fuerte' (...) Esta situación me asustó mucho y temí por mi vida".

Al momento en que cayó al suelo, los agresores continuaron golpeándolo. En el momento en que le quitaron su teléfono, él se apresuró a tomar su billetera para que no se la quitaran. "Pasados unos minutos sentí que una persona se lanzó sobre mí, al mirar su rostro me di cuenta de que se trataba de mi compañera de trabajo F.P. quien intentaba ayudarme para que no siguieran golpeándome. Varios compañeros de trabajo comenzaron a dispersar a los agresores".