Cultura

¿A usted le gusta la película “Star Wars”? Si es así, es probable que, en más de alguna oportunidad, se haya imaginado luchando como un Jedi, un miembro de la revolución o soldado imperial. Ahora, y en el caso de que tenga mucho dinero, podría considerar cumplir parte de esos sueños adquiriendo la mismísima espada láser que el personaje de “Darth Vader” ocupó en películas como “El Imperio Contraataca” (1980) y “El Regreso del Jedi” (1983). 

Resulta que la casa de subastas Propstore anunció que en el mes de septiembre pondrá a disposición dicho artículo, con un precio estimado que fluctúa entre uno y tres millones de dólares. De hecho, en su sitio web, se especifica que el láser fue el mismo que “Vader” (personificado por el actor David Prowse y por el doble de acción Bob Anderson) ocupó durante las peleas con “Luke Skywalker” (Mark Hamil).

En términos técnicos, el accesorio “está construido a partir del mango del flash de una cámara de prensa británica”. Además, se indica que la espada “se convirtió en un láser añadiéndole componentes de aderezo, como empuñaduras de plástico, pequeños cables eléctricos y una placa con circuitos con burbujas de aumento de una calculadora”.

A su vez, la casa de subastas asevera que “los accesorios de sable de luz genuinos de la trilogía original son increíblemente raros” y sostiene que “este es el único accesorio de sable de luz de héroe con uso de pantalla verificable que se haya ofrecido, alguna vez, en una subasta pública”. 

Ahora, fuera del valor monetario, es interesante preguntarse por el valor simbólico que puede llegar a tener un artículo de este tipo. Verushka Fuentes, licenciada en Comunicación Publicitaria y académica de la Facultad Tecnológica de la Universidad de Santiago, indica que para poder dimensionar eso, “hay que entender la narrativa que está detrás del objeto, que es bien arquetípica y que tiene relación con la tragedia y con el héroe. Vemos a un joven (“Luke Skywalker”) que se enfrenta con su padre (“Darth Vader”) sin conocer el parentesco y sintiendo que es su peor enemigo y al que, al final, le termina quitando la vida. Muestra el climax más importante de toda la serie y que se ha repetido muchas veces, inclusive, dentro de la misma publicidad”.

Para Fuentes, todo lo anterior se ve complementado con “un excelente trabajo de marketing que se aplicó en todas las películas de saga” recordando, también, que el universo que agrupa a estas producciones fue el primero en sacar “poleras, camisetas, miniaturas y diferentes tipos de juguetes”.

La especialista manifiesta que “Star Wars trascendió al producto en sí mismo y logró entregar una experiencia en 360°, es decir, más allá de la sala de cine”.

Por lo mismo, indica que “La Guerra de las Galaxias” representa “a toda una generación” y todo lo que provenga de esta historia “va a tener acogida dentro de ciertos grupos o nichos de mercado”.