Cultura

Este sábado 31 de mayo, Javiera Mena volverá al escenario del Teatro Caupolicán para celebrar la publicación de “Inmersión”, el sexto larga duración de su discografía oficial y con el cual da cuenta de una sonoridad mucho más intimista y que dista de lo que mostró en títulos llenos de pop candente, como en su aplaudido “Otra era” (2014), “Espejo” (2018) o en “Nocturna” (2022).

En conversación con La Tercera, la cantante afirmó que para su álbum más reciente se puso como tarea hacer canciones “que tú pudieras tocar en la guitarra”. Y en una visita promocional a la radio Rock & Pop, cuando se le preguntó sobre su nueva propuesta, la intérprete de “Hasta la verdad” señaló su cambio de sonoridad estaba  justificado en su gusto por no hacer “discos iguales”.

En lo que respecta a créditos, Mena escribió los temas de su nueva entrega junto a LUICHI, de la banda española Cupido y fue co-producido por la interprete nacional junto a Isidro Acedo y Pablo Stipicic. 

Al momento de escucharlo, la nueva entrega de la compositora chilena da cuenta de una fuerte presencia de baladas, arreglos de cuerda, un espíritu menos “pistero” y un viaje “calmo” para sus auditores. La propuesta se percibe desde el comienzo con el tema “Palacio de Hielo”, y luego se expresa en las nueve canciones restantes: “Na na na” (con sus influencias orientales); “Pez en el agua”; “Reina de la selva” (una de las más cercana a sus sonidos pop anterior); “Claro de luna”; “Volver a llorar”; “Esta ciudad”; “Mar de coral”; “Absurda” y “Entropía”. 

Una persona que sabe mucho de Javiera Mena es Felipe Cussen, director del Doctorado en Artes y Humanidades, del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Santiago. De hecho, por estos días el académico, que también es poeta y músico electrónico, está trabajando en un proyecto de investigación interno de la Usach (DICYT) de la Vicerrectoría de Investigación, Innovación y Creación que lleva por título “Música Mística”, un “paper” que tiene como uno de sus objetivos el análisis de la obra interprete nacional.

Sobre ese estudio, el académico explica que su mirada se centra “en los vínculos entre la música electrónica contemporánea y distintas tradiciones místicas”.

Felipe Cussen señala  que “para desarrollarla tomé composiciones de Javiera Mena y de la italiana Caterina Barbieri, quien tiene una estética más experimental. El propósito es ver cuáles son los símbolos que aparecen en esta música, que tipo de procedimientos se pueden ocupar para que produzcan algo parecido a una sensación espiritual en quienes la escuchan y analizar qué tradiciones de pensamiento hay detrás. Por ejemplo, en el hinduismo, el sonido ocupa un rol súper importante y se piensa que eso es lo que genera la creación”.

EL CAMINO DE JAVIERA MENA

Si contamos solamente los discos oficiales, Javiera Mena ha publicado seis álbumes de la larga duración: “Esquemas juveniles” (2006); “Mena” (2010); “Otra era” (2014); “Espejo” (2018); “Nocturna” (2022) e “Inmersión” (2024). Además, su carrera, que comenzó desde la vereda de la música “indie” tuvo un crecimiento que poco a poco la fue instalando con una fuerte presencia en los mercados hispanoamericanos (en países como Colombia, México o España) y por años, fue considerada como uno de los estandartes del pop chileno surgido tras el cambio de siglo.

Para Cussen, “es súper interesante su salto al ‘crossover’. En sus inicios tuvo una trayectoria muy independiente y de mucha colaboración con otros músicos (en una época en la que casi no había ni sellos), pero eso no le impidió ocupar espacios destinados a contenidos más comerciales".

El académico agrega que "ella tenía una actitud hecha muy a pulso y nunca fue un producto. Además, desde sus primeros discos ella fue la productora, y a la vez, trabajó con otra gente para esa labor. Pero es importante señalar que Javiera Mena no es una creación de laboratorio ni mucho menos. Es todo lo contrario”.

A su vez, el académico de IDEA Usach explica que la chilena “ha hecho una carrera internacional bien interesante y en su composición hay elementos de carácter cultural que son muy atractivos. Por ejemplo, es una artista que ha puesto el amor de las mujeres lesbianas en primer plano, esto en un ámbito muy machista como el de nuestro país. Ella le ha dado un espacio bien atractivo a distintas formas de expresión y de orientación sexual”.

Y en cuando a las canciones, Felipe Cussen asevera que la intérprete de “Espada” “sigue la tradición de compositores como los estadounidenses Burt Bacharach o Brian Wilson (el líder de los Beach Boys) quienes tenían conocimientos muy complejos y que los sabían trasladar muy bien al formato canción, que es breve, contenido, y en que, a su vez, se pueden hacer muchas cosas”.

EL SONIDO DE “INMERSIÓN”

Cuando Javiera Mena explicó “Inmersión” en una entrevista concedida al diario La Tercera, la cantante señaló que “es un disco que tiene que ver con mirarse, con meterse muy internamente, y eso es la inmersión también. Muchas canciones también hablan del agua. El agua tiene que ver mucho con las emociones también, con las emociones profundas, con adentrarse. Es un disco que conecta con las emociones. Un poco como la inmersión, que no tiene mucho control. Es solo meterte y era, como dicen”.

Y con esas palabras se entiende el sonido más apegado al pop de guitarra, al soul y a las canciones de autor de la década de los 70's que al de la fiesta en una pista de baile. Para Felipe Cussen, “este es un álbum bastante distinto a los otros. Es muy de intimidad, de volver a ocupar la guitarra eléctrica con cambios de timbre muy interesantes, hay muchas cuerdas. Es un disco bien complejo y que demuestra algo que también es muy importante para los artistas: el no repetirse y expandir su lenguaje incorporando nuevos elementos, revisitando otros que ya ha aplicado antes. Hay un riesgo de ir a la fórmula segura”.

A todo eso, el poeta agrega que “Javiera Mena es una artista muy curiosa, siempre está en nuevas búsquedas y para quienes la seguimos, es fascinante poder acompañar ese camino”.

EL SHOW EN EL CAUPOLICÁN

“Inmersión” ya está en todas las plataformas digitales y, tal como indicamos en el inicio de esta nota, su presentación en vivo está fechada para este sábado 31 de mayo en el Teatro Caupolicán, el añoso recinto ubicado en calle San Diego 850, Santiago Centro.

Las entradas para asistir al recital de Javiera Mena se venden a través del sistema Puntoticket con precios que fluctúan entre los $17.250 y los $46.000.